Son las llamadas cultivadoras. Depositan granos de maíz y semillas de flores en trojes subterráneos. Sabido es que una semilla puesta en la tierra húmeda y caliente, germina y se desarrolla; pues bien, la hormiga consigue, por un procedimiento desconocido, impedir que crezca, lo que seria imposible para nosotros. Compruébase, en efecto, que los graos germinan y crecen si se apartan las hormigas, pero entonces pierden para ellas todo valor alimenticio; en cambio, si vigilan las hormigas, brotan solamente lo bastante para desdoblar el almidón en azúcar, y ahí se detiene su crecimiento. La hormiga corta en ese momento la raicilla; pone el grano a secar al sol, y después lo tritura, convirtiéndolo en una harina dulce, excelente alimento que la nutre todo el invierno. Admira aun mas el proceder de la agricultora, cual cosecha una semilla llamada arroz de hormiga; algunos pretenden que también la siembra; pero esto ultimo es inexacto o dudoso; lo cierto es que destruye todas las plantas que crecen al rededor de su nido, menos la del arroz y que cuando este fructifica separa las semillas y las coloca en depósitos subterráneos.